Según los cambios propuestos, los pagos por transferencia efectuados por los viajeros para viajes combinados no pueden superar el 25% del precio, previendo una excepción en caso de que se trate de los costes de los billetes de avión.
Por otra parte, los organizadores no podrán exigir el pago íntegro antes de que transcurran 28 días antes del inicio del viaje combinado.
La Comisión también quiere establecer normas para proteger a los pasajeros que utilicen distintos tipos de transporte, como autobuses, trenes y aviones, en todos los viajes.
Los pasajeros se beneficiarán de mejores derechos de información antes y durante estos viajes, sobre todo en lo que respecta a los tiempos mínimos de conexión entre los distintos servicios de transporte.
Si el viaje multimodal se realiza en el marco de un contrato de transporte, los pasajeros tendrán derecho a recibir asistencia del transportista en caso de pérdida de conexiones.
Las nuevas normas también prevén que los pasajeros con discapacidad o movilidad reducida reciban asistencia cuando cambien de un modo de transporte a otro.
Bruselas presentó una propuesta sobre los derechos de los pasajeros y otra sobre los derechos en el contexto de los viajes multimodales.
Alrededor de 13.000 millones de pasajeros viajan cada año en avión, tren, autobús o transbordador en la UE, y se espera que este valor alcance los 15.000 millones de euros en 2030 y casi 20.000 millones en 2050.