"El suministro público está garantizado, ya que existe una reserva para dos años de abastecimiento. Sin embargo, es importante apelar al uso sostenible del agua por parte de la población, evitando el despilfarro de agua en los usos cotidianos, el lavado de coches y el llenado de piscinas privadas", dice la APA, en una respuesta enviada a Lusa.
Desde el 1 de febrero, se ha suspendido la producción de energía en cinco presas debido a la escasa reposición de los volúmenes almacenados en los embalses, los valores de precipitación observados, significativamente inferiores a la media, y para garantizar los volúmenes necesarios para los usos prioritarios.
La APA dijo a Lusa que el acondicionamiento de la producción de energía en las presas de Alto Lindoso, Alto Rabagão, Cabril, Castelo do Bode y Vilar Tabuaço se está reevaluando constantemente, dependiendo la continuación de la suspensión de la evolución de la situación.
La agencia supervisada por el Ministerio de Medio Ambiente también garantiza que comprueba semanalmente la necesidad de aplicar medidas en vista de la evolución de la situación.