El puente internacional más pequeño del mundo se encuentra en Arronches, un pueblo del distrito de Portalegre. Se llama Puente Internacional Marco y mide sólo 6 metros de largo y 1,45 metros de ancho.
Este puente tiene un aspecto visual muy rústico, que sugiere que es más antiguo de lo que en realidad es, pero se trata, de hecho, de una estructura ecológica, con suelos de madera y barandillas laterales hechas con troncos de árboles.
Según NiT, que cita información de la web del Ayuntamiento de Arronches, en el pasado, el Puente Internacional del Marco no era más que un "muelle improvisado" que permitía el comercio entre contrabandistas de los dos países de la Península Ibérica de productos como tabaco, café, corcho y aceitunas.
Este muelle improvisado acababa siendo arrastrado por las aguas del río Abrilongo cada vez que llovía y eran los habitantes de las dos localidades los que tenían que reponer los tablones de madera para poder pasar entre un país y otro.
Pero fue en 1996, con el acuerdo de Schengen, cuando se puso fin a estos intercambios comerciales ilegales. Y en 2008, con el apoyo de fondos comunitarios, se reconstruyó el puente, dándole el aspecto visual que se puede ver hoy en día
A pesar de las evidentes mejoras en su estructura, el Puente Internacional de Marco sólo permite el paso de peatones y vehículos de dos ruedas, dadas sus reducidas dimensiones.