El gasto en consumo de los hogares de la Unión Europea (UE), ajustado a la inflación, tuvo un ligero aumento del 0,5% el año pasado, lo que contrasta con el incremento interanual del 5,4% registrado en 2022. Portugal es el séptimo Estado miembro con mayor gasto, por encima de la media comunitaria, pero registró el cuarto mayor crecimiento (+3,8%) en este indicador, según Eurostat.
Los datos divulgados por la Oficina Estadística Europea revelan que, en 2023, el gasto en consumo de los hogares aumentó más en los servicios de alimentación y alojamiento (+4,6%), seguidos de los transportes (+4,3%) y las actividades recreativas, deportivas y culturales (+3,0%).
Se entiende por gasto en consumo final el gasto realizado por las familias residentes en bienes o servicios, utilizados para satisfacer directamente necesidades o deseos individuales o necesidades colectivas de los miembros de la comunidad.
Comparando la evolución desde 2021, año todavía marcado por las restricciones debidas a la pandemia Covid-19, los gastos de consumo de los hogares en servicios de restauración y alojamiento y en actividades recreativas, deportivas y culturales experimentaron un crecimiento significativo del 41,3% y del 23,5% %, respectivamente.
En sentido contrario, el mobiliario, equipamiento doméstico y mantenimiento corriente de la vivienda (-4,9%) fue el segmento con mayor caída del gasto en consumo final de los hogares en 2023, registrándose también descensos en alimentos y bebidas no alcohólicas (-3,7%) y en bebidas alcohólicas, tabaco y estupefacientes (-2,2%).
Entre los 19 Estados miembros con datos disponibles, Malta registró el mayor aumento (+17,5%) del gasto en consumo final de los hogares el año pasado, seguida de Chipre (+7,7%) e Irlanda (+4,2%). %), mientras que Suecia (-2,7%), Hungría (-2,6%) y la República Checa (-2,2%) registraron las mayores caídas.