Según el MAI, también se multó a 41 aerolíneas por embarcar a estos pasajeros sin que la prueba fuera negativa.
En un balance de esta medida de control de los casos de covid-19, el MAI dijo a Lusa que, entre el 1 de diciembre y el 16 de enero, la PSP y el SEF inspeccionaron a 1.586.295 pasajeros y 15.309 vuelos, lo que dio lugar a 2.370 infracciones.
De las 2.370 actas de infracción, 1.561 fueron levantadas por el PSP, que controla a los pasajeros de los vuelos procedentes del espacio Schengen (espacio europeo de libre circulación de personas), y 809 por el SEF, que inspecciona a los viajeros procedentes de países no pertenecientes al espacio Schengen.
Desde el 1 de diciembre de 2021, todos los pasajeros que lleguen a Portugal por vía aérea están obligados a presentar un test negativo o un certificado de recuperación al desembarcar.
Los pasajeros de vuelos nacionales, los niños menores de 12 años y las tripulaciones están exentos de la obligación de someterse a la prueba, PCR o rápida.
Las aerolíneas que transportan pasajeros sin un test negativo incurren en una multa de entre 20.000 y 40.000 euros por pasajero y los viajeros también están sujetos a multas, entre 300 y 800 euros, por no presentar un test a la llegada.
El MAI también indica que entre las 2.370 infracciones se encuentran ocho extranjeros a los que se les denegó la entrada en el país por no presentar el test a la llegada, ya que sólo se permite realizar la prueba en el aeropuerto a los ciudadanos de nacionalidad portuguesa, a los extranjeros residentes en Portugal y al personal diplomático.
Los datos del MAI también muestran que se realizaron 2.403 pruebas de diagnóstico en los aeropuertos a pasajeros que entraron en el país sin este documento.
En las fronteras terrestres, también desde el 1 de diciembre, los ciudadanos de países no pertenecientes a la Unión Europea y de países de la UE considerados de riesgo rojo o rojo oscuro necesitan una prueba negativa o un certificado de recuperación.
Los ciudadanos de los países de la UE considerados de riesgo bajo o moderado deben tener una vacuna, una prueba o un certificado de recuperación para entrar en Portugal.
La GNR y el Servicio de Extranjería y Fronteras realizaron 17.021 operaciones de vigilancia aleatoria en las fronteras terrestres hasta el 10 de enero para garantizar las pruebas de Covid-19, según el MAI.
En el marco de estas operaciones, se realizaron más de 100.000 inspecciones en vehículos ligeros y de mercancías, motocicletas, trenes y autobuses, que dieron lugar a 36 actas de infracción administrativa por falta de certificado de prueba o de recuperación.
El MAI también menciona que se realizaron 532 pruebas de diagnóstico en las fronteras terrestres.
El control en las zonas fronterizas durará hasta el 9 de febrero.