La percepción de buena salud de los portugueses disminuyó en comparación con 2020, año en el que el 51,3% de los portugueses se consideraban sanos o muy sanos. El país se sitúa por debajo de la media de la UE, donde el 69% de los encuestados considera que su salud es buena o muy buena. La media de la alianza también disminuyó en comparación con 2020 (69,5%).

Los datos fueron comunicados por Eurostat y afirman que entre los países miembros de la UE (y en oposición a la realidad portuguesa), los países donde la mayoría de la población de 16 años o más dice sentirse sana o muy sana son Irlanda (81,2%), Grecia (78,3%), Chipre (77,2%) y Luxemburgo (76,5%).

Por término medio, en el último año, siete de cada diez habitantes de la UE mayores de 16 años calificaron su estado de salud de bueno o muy bueno (lo que corresponde al 69% de la muestra). De forma similar a la realidad portuguesa, son los hombres quienes tienen una percepción más positiva de su salud, concretamente el 72% frente al 67% de las mujeres.

La única excepción es Irlanda. En el país del noroeste de Europa, las mujeres son las que más consideran tener una salud buena o muy buena, aunque la diferencia no es muy expresiva (81,4% de las mujeres frente al 81% de los hombres).

Según los datos de Eurostat, la percepción de buena o muy buena salud disminuyó con la edad en 2021. El grupo de edad de 16 a 24 años se considera el más sano, registrándose un descenso gradual hasta los 85 años o más, donde sólo el 2,4% de los encuestados se considera muy sano.

La diferencia en la salud percibida entre hombres y mujeres también aumenta con la edad. En los grupos de mayor edad, la diferencia de puntos porcentuales entre sexos era mayor que en los grupos de menor edad.

En el grupo de edad de 75 a 84 años, había una diferencia de 6,3 puntos porcentuales entre hombres y mujeres. Por su parte, en el grupo de edad de 85 años o más, había una brecha de 5 puntos porcentuales.


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