En el inicio de la temporada de baño, la campaña de la Sociedad Portuguesa de Patología de la Columna Vertebral(SPPCV) quiere concienciar a la población sobre el tema de las zambullidas y las consecuencias de inmersiones mal calculadas, tanto en piscinas como en playas.
"Para prevenir lesiones medulares, recomendamos comprobar siempre la profundidad del agua antes de bucear y permanecer siempre dentro de la zona vigilada, tanto en la playa como en la piscina", advierte la sociedad en un comunicado.
La SPPCV pide que se eviten "conductas de riesgo", como bucear de espaldas o tomar bebidas alcohólicas antes de sumergirse.
"En el mar, no te tires de cabeza, entra siempre el primero, y en la piscina elige el lugar donde te vas a zambullir en función de la profundidad. No corras por la piscina y respeta siempre la señalización", recomienda Bruno Santiago, neurocirujano y presidente de la SPPCV.
En el marco de esta campaña, la SPPCV hace un llamamiento a cualquier persona que presencie un accidente y sospeche de una lesión medular para que contacte inmediatamente con el 112 y llame a una ambulancia, y nunca debe mover a la persona, ya que cualquier movimiento en una columna ya dañada puede causar daños permanentes.