Promovido por la Asociación Portuguesa de Familias Numerosas(APFN), el Estudio de los Servicios Básicos resulta del análisis de las tarifas de abastecimiento de agua, saneamiento y residuos, practicadas el 31 de octubre de 2023, en todos los municipios portugueses, incluidas las islas, concluyendo que "existe una falta de igualdad en el precio de estos servicios".
En declaraciones a la agencia Lusa, la responsable del estudio, Filipa Baker, destacó que existe "una gran injusticia en términos de precios" cobrados por estos tres servicios básicos en Portugal, explicando que el análisis se realiza "desde dos perspectivas", la dimensión familiar y las tarifas de los 308 municipios portugueses.
"Las familias más numerosas, en general, acaban pagando un precio por metro cúbico de consumo más elevado que si vivieran en una familia más pequeña", afirmó Filipa Baker, señalando que la mayoría de las tarifas de suministro de agua están escalonadas para penalizar el despilfarro, pero sin tener en cuenta el número de personas que componen el hogar, "penalizando fuertemente a las familias numerosas".
En el suministro de agua, que es el "servicio más caro para las familias", las diferencias nacionales en la factura total anual pueden ascender a 1.500 euros para un mismo consumo, "por ejemplo, si una familia de 10 personas vive en Lajes das Flores, en las Azores, paga 53,52 euros/año, pero si vive en Tábua, Santa Comba Dão o Mortágua el valor se fija en 1.596,67 euros/año".
En cuanto al saneamiento, la discrepancia de precios es "cercana a los 1.000 euros", comparando el caso de una familia de 10 personas que vive en Mortágua (40,22 euros/año) con el de una que vive en Covilhã (1.027,31 euros /año).
En cuanto al servicio de residuos sólidos, el estudio de la APFN identificó una diferencia de 400 euros/año para el mismo consumo, en el caso de una familia de 10 personas, que en Sever do Vouga paga 17,20 euros/año, mientras que en Tavira paga 423,75 euros/año.
Según el estudio, entre municipios de un mismo distrito, también hay "enormes discrepancias", sobre todo en Oporto, en el caso de una familia de 10 miembros, en la factura anual referida al componente variable, mientras que en el suministro de agua si se vive en Lousada se pagan 128 euros, pero en Valongo se pagan 1.185 euros; en saneamiento, puede variar entre 97 euros en Matosinhos y 703 euros en Gondomar; y en residuos, puede beneficiarse de una tarifa variable cero en Paredes o Marco de Canaveses, mientras que en Maia paga 296 euros.
Filipa Baker también mencionó que las tarifas actuales están diseñadas para penalizar los residuos en familias de tamaño medio, con tres personas, pero el país, "por desgracia, cada vez tiene familias más pequeñas y más personas que viven aisladas", y el concepto de familia numerosa se ha aplicado a partir de cinco elementos.
En este contexto, la APFN defiende la implantación de tarifas familiares -234 municipios ya las tienen en abastecimiento de agua, 212 en saneamiento y 54 en residuos-, para corregir la "injusticia" en cuanto a los importes cobrados, y la reducción de las marcadas disparidades en la base de precios de estos servicios básicos, con el fin de "igualar la situación a nivel de país", a pesar de que existen "muchos condicionantes geográficos".