Según el estudio EY Attractiveness Survey Portugal, que evalúa la percepción de los inversores extranjeros sobre el atractivo del país como destino de IED, Portugal ascendió al 6º puesto en la clasificación de países europeos con más proyectos de IED anunciados. Pero no todo son buenas noticias, sobre todo en el sector inmobiliario: la elevada presión fiscal, con el aumento de los tipos del IMI y del IMT, está ahuyentando la inversión extranjera, según un informe de idealista.

"La mayor parte de la IED realizada fue en el sector de software y servicios informáticos - 99 proyectos -, de los cuales 76 representan empresas que establecen sus operaciones en Portugal por primera vez, reforzando el atractivo del país para la economía digital. Siempre en línea con los años anteriores de la Encuesta de Atractivo de EY, el 59% de los inversores esperan que el atractivo de Portugal mejore en los próximos tres años", afirma EY en un comunicado.

Inversión alemana

Según el estudio, Alemania, con 36 proyectos, superó a Estados Unidos en el número de proyectos de IED dirigidos a Portugal, convirtiéndose en el principal inversor en territorio luso. Las inversiones procedentes de Alemania, Estados Unidos y Francia se dirigieron principalmente a Software & IT Services (39 proyectos), representando estos tres países el 39,4% del total de proyectos del sector.

"La importancia de Portugal en el total de proyectos europeos de IED también ha ido en aumento. Entre 2018 y 2022, el peso relativo del país en el total de proyectos de IED en Europa aumentó del 1,2% al 4,2%", concluye el estudio.

Alrededor del 29% de los inversores considera que Portugal está por encima de la media europea en términos de disponibilidad y calidad del talento en el mercado laboral, mientras que el 73% de los inversores encuestados quiere invertir en Portugal, más que la media europea (67%).

Elevada presión fiscal

La aplicación de ajustes reglamentarios y de políticas medioambientales, así como el apoyo a las PYME, son las principales áreas que los inversores consideran que ayudarán a Portugal a mantener su posición competitiva.

En el caso concreto de la inversión inmobiliaria, la elevada presión fiscal es un problema. Según un reportaje del Jornal de Negócios, Pedro Fugas, socio de EY, recuerda que los países del Golfo, pero también Hong Kong, territorio "a través del cual China realiza gran parte de sus inversiones en el extranjero", están obligados, en Portugal, a tasas de IMI e IMT más elevadas, ya que figuran en la lista de "paraísos fiscales" elaborada por el Ministerio de Finanzas.

"Esto supone un obstáculo para las inversiones procedentes de estos países, con los que ya existen acuerdos de intercambio de información. Es un mensaje claro de Portugal de que cualquier inversión procedente de estos países tiene una penalización en comparación con las inversiones procedentes de otros".

Según la publicación, desde 2021, cualquier entidad que posea inmuebles en Portugal -o que los adquiera- pasa a pagar tipos de IMI e IMT incrementados siempre que esté controlada directa o indirectamente a través de una entidad que tenga su domicilio fiscal en un país, territorio o región sujeto a un régimen fiscal más favorable, incluido en una lista aprobada por orden del ministro de Finanzas, es decir, en uno de los llamados "paraísos fiscales". En lugar del tipo normal del IMI, entre el 0,3% y el 0,45% (según la decisión de los ayuntamientos), estos propietarios pagan un tipo único del 7,5%. En el IMT, el tipo único es del 10%, en lugar de los tipos progresivos, un máximo del 7,5% para los inmuebles de más de un millón de euros.

Pedro Fugas considera que unos costes muy elevados desaniman a los inversores y defiende que "no se apliquen tipos más elevados cuando la entidad tenga su sede en un paraíso fiscal que haya firmado un acuerdo de intercambio de información con Portugal o un acuerdo para evitar la doble imposición".