"Hacemos un llamamiento a todas las entidades gubernamentales que tutelan esta zona, para que nos ayuden, porque sin ayuda no sé cómo podremos sobrevivir con una planta que requiere agua y que además es el ex-libris de este territorio", dijo a Lusa el presidente de la Asociación de Regantes y Beneficiarios de Silves, Lagoa y Portimão.
João Garcia teme que la falta de agua provoque caídas significativas en la producción normal de la mayor región productora de cítricos del país, una situación que también podría llevar a la "desaparición" de este cultivo en el municipio algarvío.
Según datos de esta asociación, el perímetro agrícola de Silves, Lagoa y Portimão tiene el 90% de sus tierras agrícolas dedicadas a la producción de cítricos y el 50% de la producción portuguesa de este subsector se cultiva en el primero de estos municipios.
"La situación es muy preocupante, estamos ante un problema de sequía severa y un problema de falta de agua en esta zona", insiste João Garcia.
El agricultor recuerda que "desde 2019 prácticamente no llueve en este territorio" y que en los últimos tres años ha habido "racionamiento de agua".
"Pero hemos llegado a un punto en el que no tenemos agua. Así que esta es la situación más preocupante", ha dicho.
João Garcia asegura que, si la sequía, como parece, continúa, "la producción [de naranja] caerá", con todas las consecuencias que ello tendrá, como el aumento de los precios y la disminución de las exportaciones.
En los últimos meses se ha hablado cada vez más de la importancia de construir la desaladora prevista en el Algarve, así como de la posibilidad de trasvasar agua del Norte al Sur del país.
"Esperamos que todos estos proyectos se lleven a cabo, pero nuestra mayor preocupación es el mañana, y mañana no tendremos agua [...] y hace casi dos meses que nuestros agricultores no tienen agua para dar a sus huertos", lamentó João Garcia.