"La producción de este año puede haber sido en torno a un 10% superior a la de un año normal", declaró a la agencia Lusa el presidente de AlgarOrange, José Oliveira.

Según el dirigente agrícola, la última campaña "fue bien", a pesar de los problemas a los que tuvieron que hacer frente los productores, a saber, la falta de agua y las plagas que atacaron a los árboles.

José Oliveira pronosticó, por otra parte, que "las expectativas para la próxima temporada [2024-2025] son casi idénticas a la que terminó en septiembre".

Las estimaciones se realizaron a partir de una muestra de un grupo de asociados de AlgarOrange responsables de cerca del 30% de la producción del Algarve.

Esta muestra representativa del sector indica también que, del total de cítricos producidos, alrededor del 84% eran naranjas, el 8% mandarinas y clementinas y el 7% limones.

Los datos presentados en la conferencia indican, sin embargo, que la producción estimada para la cosecha 2023-2024, 335 mil toneladas, estaba por debajo de las estimaciones realizadas en 2022 en base a los datos de la Unión Europea, que apuntaban a 462 mil toneladas.

Según AlgarOrange, cerca del 74% de la superficie y el 88% de la producción citrícola del país se localiza en el Algarve.