PS y BE criticaron, en una reunión del ejecutivo del ayuntamiento, las nuevas normas para acceder a las pruebas gratuitas en la ciudad, en vigor desde el sábado, por considerar que limitan el acceso a las pruebas.
Con la nueva normativa, el ayuntamiento pasó a pagar las pruebas en las farmacias sólo después de que el usuario haya agotado las pruebas a las que tiene derecho mensualmente a través del SNS (seis) y, a partir de ahí, sólo paga las pruebas realizadas con intervalos mínimos de tres días, tanto en las farmacias como en los centros fijos instalados por el ayuntamiento.
El teniente de alcalde del ayuntamiento, Filipe Anacoreta Correia (CDS), afirmó que nunca se habían realizado tantas pruebas en la ciudad como en noviembre y diciembre y que la red municipal de pruebas ha aumentado, con la instalación de más centros y con la ampliación de los horarios de apertura.
Anacoreta Correia garantizó que no se ha reducido la capacidad de pruebas, sino todo lo contrario, y que la cámara está trabajando para aumentarla, a través de protocolos con laboratorios de análisis, y de momento sólo hay un acuerdo con uno.
Dijo que espera que haya más laboratorios con el protocolo de Câmera "rápidamente".
En cuanto a las pruebas en las farmacias, dijo que la cámara ya ha gastado alrededor de 13 millones de euros en pruebas de covid-19 y que, hasta esta semana, la contribución del Gobierno a los cribados en la ciudad era casi nula.
Anacoreta Correia añadió que la Cámara sigue garantizando todas las pruebas gratuitas realizadas por los no residentes en Portugal, que no tienen número de usuario del Servicio Nacional de Salud (SNS).