La ISU, con sede en Francia y dedicada por entero a la educación y la investigación centradas en el espacio, está estudiando la posibilidad de abrir un nuevo campus en Portugal. Aunque la decisión aún no se ha concretado, los indicios apuntan a un interés creciente que podría reportar beneficios a largo plazo para la economía, la comunidad científica y el ecosistema tecnológico portugueses.
La expansión comenzaría probablemente a través de asociaciones académicas y programas de formación conjuntos con una universidad portuguesa, para evolucionar finalmente hacia un campus satélite plenamente operativo. Una de las regiones consideradas es el norte de Portugal, que ya cuenta con una sólida base académica y de ingeniería. Este proyecto podría establecer un nuevo centro de educación espacial en el país, reforzando la posición de Portugal como economía espacial emergente en Europa.
Esta iniciativa coincide con una tendencia mundial más amplia: la transformación del espacio de un ámbito dominado por los gobiernos en un sector económico de pleno derecho. En los últimos años, la industria espacial se ha vuelto más dinámica, impulsada cada vez más por agentes comerciales y colaboraciones internacionales. La presencia de la ISU en Portugal podría reforzar las capacidades del país en el desarrollo de la mano de obra espacial, la innovación y los campos educativos interdisciplinares, fundamentales para seguir el ritmo de estos rápidos cambios.
El atractivo de Portugal como destino para la expansión de la ISU no es casual. Además de sus fortalezas académicas, el país ha demostrado un compromiso estratégico con el sector espacial. Un activo notable es el puerto espacial que se está construyendo en la isla de Santa María, en las Azores. Se espera que esta instalación sirva para el lanzamiento de cohetes suborbitales y, a partir de 2027, para el aterrizaje del vehículo espacial reutilizable de Europa, el Space Rider. Esta infraestructura sitúa a Portugal como una puerta única de acceso al espacio dentro de Europa.
Además, las empresas y los científicos portugueses han desempeñado un papel activo en los principales proyectos espaciales europeos, mientras que están empezando a surgir nuevas empresas locales con tecnologías especializadas para la construcción de satélites, servicios de datos y sistemas de lanzamiento. Estos avances reflejan la maduración de un sector que está contribuyendo a la diversificación económica y a la creación de empleo en áreas de alta tecnología.
Si la ISU se implanta en Portugal, podría acelerar estas tendencias atrayendo talento, fomentando colaboraciones internacionales y formando a una nueva generación de profesionales del sector espacial. El enfoque de la universidad va más allá de la ingeniería aeroespacial tradicional para incluir la legislación espacial, la política, los negocios y las habilidades de colaboración interdisciplinar que son cada vez más esenciales a medida que la economía espacial se integra más en la vida cotidiana en la Tierra.
La situación geográfica de Portugal, su infraestructura científica y su apertura a la innovación lo convierten en un candidato convincente para este tipo de inversión educativa. Acoger un campus de la ISU enviaría una señal clara a la comunidad espacial mundial de que Portugal no sólo participa en la nueva carrera espacial, sino que contribuye a forjar su futuro.
En un mundo en el que el espacio se está convirtiendo en un ámbito de oportunidades económicas, educación e importancia geopolítica, los países que inviertan en conocimiento e infraestructuras estarán mejor posicionados para liderar. La posible llegada de la ISU a Portugal podría marcar un capítulo fundamental en las ambiciones espaciales del país, en el que la educación y la innovación vayan de la mano para lanzar una nueva era de crecimiento.
Como la decisión final se espera para finales de año, todas las miradas estarán puestas en cómo se desarrolla esta asociación. Lo que ya está claro es que Portugal se prepara para elevar su perfil espacial, con la educación y la cooperación internacional en el centro de su estrategia.
Paulo Lopes is a multi-talent Portuguese citizen who made his Master of Economics in Switzerland and studied law at Lusófona in Lisbon - CEO of Casaiberia in Lisbon and Algarve.
