El Gobierno portugués anunció que en 2021 la ratio de deuda pública había registrado el mayor descenso desde la Segunda Guerra Mundial, después de haber subido de forma récord en 2020 a causa de la pandemia. Sin embargo, según los datos de Eurostat, Portugal fue el tercer país que más redujo su deuda pública el año pasado, por detrás de Grecia y Chipre. Además, sigue teniendo la tercera ratio más alta de la UE.
Según un informe de ECO, la deuda pública de Portugal se redujo en 7,8 puntos porcentuales, pasando del 135,2% del PIB en 2020 al 127,4% del PIB en 2021. Sin embargo, había subido 18,6 puntos porcentuales de 2019 (116,6% del PIB) a 2020 por el doble impacto de la pandemia en la deuda y el PIB.
En el caso de Grecia, donde la ratio se redujo en 13,1 puntos porcentuales, la deuda pública bajó del 206,3% del PIB en 2020 al 193,3% del PIB en 2021. Chipre vio cómo su ratio se reducía del 115% del PIB en 2020 al 103,6% del PIB en 2021, es decir, 11,4 puntos porcentuales menos. Fueron los únicos Estados miembros de la Unión Europea que redujeron su deuda más que Portugal.
A pesar de esta fuerte reducción de la ratio, Portugal sigue teniendo la tercera mayor deuda pública de la Unión Europea, sólo superada por Grecia e Italia. El objetivo del actual Gobierno es sacar al país del club de los más endeudados de la UE, siendo sustituido por Francia, Bélgica y España. Para 2026, la meta es acercarse al umbral psicológico del 100% del PIB.
"Queremos y podremos sacar a Portugal del grupo de economías con mayor deuda pública de Europa", dijo Fernando Medina este miércoles en el discurso de apertura del debate sobre el Programa de Estabilidad 2022-2026, explicando que esto es "no porque queramos ninguna distinción, sino porque es la mejor manera de defender a las empresas y a las familias".