En un comunicado, Zero afirma que, en las dos últimas semanas, se registraron 115 vuelos en el aeropuerto Humberto Delgado de Lisboa, por encima del número permitido.
Según una ordenanza de 2004, se establece un máximo de 91 movimientos aéreos semanales y 26 vuelos diarios entre las 00:00 y las 06:00 horas.
La ordenanza también establece que la autorización de movimientos aéreos durante el periodo nocturno está sujeta a los niveles de ruido de las aeronaves utilizadas.
"En las dos últimas semanas, Cero registró 139 movimientos aéreos (48 más de los permitidos) en la semana entre el 12 y el 18 de agosto y 158 movimientos aéreos (67 más) en la semana entre el 19 y el 25 del mismo mes, incumpliendo los límites establecidos en la legislación que permitía excepciones en 2004", destaca Cero.
La asociación ecologista también indica que, el día 20 de este mes, se registraron 33 movimientos aéreos entre las 00:00 y las 06:00 horas, "vulnerando el máximo diario permitido por la excepción a la ley general".
"La última cifra conocida del valor global de las multas aplicadas en estos casos es de apenas 52 mil 400 euros en 2022, cifra insignificante frente a los 206 millones de euros en costos de salud pública que determinó en 2019 el Grupo de Trabajo de la Asamblea de la República en el ámbito del Estudio y Evaluación del Tránsito Nocturno en el Aeropuerto Humberto Delgado", señala Zerón.
Ante esta situación, la asociación aboga por un conjunto de medidas, concretamente el establecimiento de un periodo sin vuelos regulares entre las 00:30 y las 05:00 horas, "con flexibilidad para que se produzcan movimientos retrasados hasta las doce y media de la noche".
"Dada la gravedad de la situación, Zero quiere que las autoridades apliquen las conclusiones del grupo de trabajo que analizó los vuelos nocturnos en el aeropuerto de Lisboa, garantizando que, como primera medida, en el verano de 2025, las operaciones de aterrizaje y despegue en el aeropuerto Humberto Delgado queden totalmente prohibidas entre la medianoche y las cinco de la mañana", destaca la nota.
Cero también aboga por que "se exija al gestor de la infraestructura que publique mensualmente el número de personas afectadas por niveles de ruido nocturno superiores a 45 decibelios y que defina una estrategia para el cumplimiento de la ley del ruido".
La asociación también quiere "la aplicación de una tasa acústica a los vuelos, en función de sus emisiones sonoras", así como la revisión de las multas por incumplimiento de la legislación".
"Según el contador de Zero, disponible en la página zero.ong, los costes de no cerrar el aeropuerto Humberto Delgado se acercan ya a los 10.000 millones de euros desde 2015, año en el que debería haberse cerrado la infraestructura", indica la asociación.