En una respuesta escrita enviada a Lusa, la Comandancia General de la GNR afirma que, durante ese período, el oficial está autorizado a utilizar "mangas elásticas" para ocultar los tatuajes.
"Si el agente no se los quita en el plazo estipulado para ello, cometerá una nueva infracción. En este caso, además de la incoación de un nuevo expediente disciplinario, se podrá valorar la conveniencia de abrir un expediente de separación del servicio, previsto en el estatuto para los oficiales de la Guardia", añade.
A iniciativa del comandante general, un oficial puede ser separado del servicio siempre que su comportamiento indique claras desviaciones de la condición de miembro de la Guardia, en particular de los requisitos morales, éticos, militares o técnico-profesionales exigidos por su estatuto y función.
La separación del servicio conlleva la extinción del vínculo funcional y la pérdida de los derechos de miembro de la Guardia, sin perjuicio de la concesión de una pensión de jubilación en los términos previstos por la ley.
Se trata de un oficial de la GNR del Comando de Braga de la GNR que fue sancionado con 30 días de suspensión por tener tatuajes en ambos antebrazos.
La suspensión figura en una orden del 27 de agosto de 2024, firmada por el comandante del Mando Territorial de Braga.
El Reglamento General del Servicio de la GNR, en la versión actualizada por una orden del 22 de octubre de 2021 del comandante general, estipula que los soldados no pueden tener tatuajes, ni otras formas de arte corporal, por debajo del codo, ni en el cuello y la cabeza.