Christian Louboutin es una de las muchas celebridades que decidieron comprar propiedades y eligieron Melides, en el Alentejo, como refugio perfecto para vivir e invertir. Sin embargo, cada vez es más difícil mantener este paraíso secreto "fuera del radar" y alejado del turismo excesivo, algo que preocupa al diseñador.
Louboutin no se opone al turismo -especialmente porque él mismo invirtió en un pequeño hotel en la zona-, pero cree que el desarrollo debe hacerse de forma responsable y sostenible, respetando el medio ambiente y la comunidad local. El diseñador francés declaró a Bloomberg que quiere evitar que Melides se convierta en la próxima St. "A la gente le emociona la autenticidad y tenemos que mantenerla así", afirmó.
Sin embargo, la región ya se ha convertido en una zona cada vez más atractiva, con el desarrollo de una serie de complejos turísticos de lujo y clubes privados en las inmediaciones, que atraen a famosos e incluso a la realeza. Ya este año circularon rumores de que el príncipe Harry y Meghan Markle habían comprado una casa de vacaciones en la urbanización CostaTerra, en Melides.
Vitor Paiva, socio de la agencia inmobiliaria Engel & Völkers en Comporta, ha declarado a Business Insider que el Gobierno portugués ha establecido límites que impiden que la zona de Melides se sature de turistas como otros lugares "calientes" como St. Tropez o Mónaco.
"Los restaurantes locales están cerrando, incluso los pequeños cafés para locales están cerrando y están siendo sustituidos por cafés más sofisticados", explicó, y añadió que algunos residentes están empezando a sentirse excluidos.
Otra preocupación creciente es que los nuevos complejos turísticos multimillonarios agoten aún más los recursos hídricos en una región donde muchos dependen de la agricultura para sobrevivir. Y también por eso Louboutin no ceja en su empeño de proteger este "lugar favorito". Es uno de los cofundadores de Intertidal Melides, una organización que reúne a terratenientes y empresarios locales para preservar el medio ambiente y fomentar las buenas prácticas.