El Parlamento portugués ha aprobado cuatro nuevas medidas que modifican significativamente las condiciones de circulación de los motociclistas. Los cambios, que pretenden aumentar la seguridad vial y mejorar las condiciones de movilidad, incluyen el fin de la inspección obligatoria para las motocicletas, la creación de una clase específica en los peajes, la autorización de la circulación por los carriles bus y la eliminación de los materiales antideslizantes en las carreteras, según un informe de Postal.

Fin de la inspección obligatoria

Uno de los principales cambios está relacionado con la revocación de las inspecciones periódicas obligatorias para motocicletas, triciclos y cuadriciclos con una cilindrada superior a 125 cm3. Según el Automóvel Club de Portugal(ACP), la legislación que preveía estas inspecciones estaba en vigor desde 2012, pero nunca fue reglamentada. Así, con la nueva decisión parlamentaria, la medida queda definitivamente eliminada del marco legal.

Reducción de los costes de peaje

Otro cambio relevante se refiere al pago de los peajes. A partir de ahora, los motoristas se beneficiarán de una nueva clase tarifaria, garantizando que el importe abonado no supere el 50% de la tarifa aplicada a los turismos de clase 1. Esta medida, también defendida por la ACP, responde a una vieja reivindicación del colectivo de motoristas, que reclamaba un régimen más justo para este tipo de vehículos.

Circulación por carriles bus

Los motoristas podrán seguir circulando por los carriles bus. Hasta ahora, esta decisión se dejaba en manos de las autoridades locales, lo que provocaba diferencias en la aplicación de la norma según el lugar. Con la nueva legislación, el permiso pasa a ser uniforme a nivel nacional, con el objetivo de mejorar la fluidez del tráfico y ofrecer una alternativa más segura a los motoristas en las ciudades.

Medidas para una mayor seguridad vial

Por otro lado, en materia de seguridad vial, se aprobó la eliminación de materiales antideslizantes en las juntas de dilatación y la instalación de badenes en las curvas potencialmente peligrosas. Con esta medida se pretende mitigar las situaciones de accidente, especialmente entre los conductores de dos ruedas, más vulnerables a las superficies resbaladizas.

Las nuevas normas se inscriben en una estrategia más amplia de fomento de la movilidad sostenible en Portugal. En los últimos años, el Gobierno ha adoptado varias medidas en este sentido, como la deducción del IVA en la compra de bicicletas y el apoyo financiero a la adquisición de vehículos eléctricos. Estas iniciativas, combinadas con nuevas disposiciones para los motociclistas, pretenden crear un entorno vial más justo y seguro para todos los usuarios.