La GNR explica que la operación continuará hasta el domingo y se centrará en las carreteras más críticas, donde hay un mayor volumen de tráfico de estos vehículos.
El objetivo de la operación es garantizar las condiciones de seguridad en el transporte de personas y mercancías y detectar infracciones, con vistas a crear un entorno vial más seguro.
La GNR recuerda, en un comunicado, que la inspección de vehículos pesados de transporte de personas y mercancías también desempeña un papel esencial en la prevención de accidentes en los que se ven implicados este tipo de vehículos, "que suelen ser bastante graves y tienen un fuerte impacto en el tráfico rodado".
Esta operación se desarrolla en el ámbito de la Red Europea de Policías de Tráfico(RoadPol), organización en la que participan las policías de tráfico de Europa y cuyo objetivo es mejorar la seguridad y el cumplimiento de la normativa vial. RoadPol ha establecido cuatro ámbitos prioritarios de actuación en materia de seguridad vial: carreteras, vehículos, usuarios y velocidad.
El principal objetivo de estas operaciones a escala europea es crear un entorno vial más seguro, "mediante la intervención simultánea sobre las principales causas de accidentes", tratando de influir en los conductores para que adopten comportamientos más seguros.