La cuestión es que las autorizaciones anuales de residencia CPLP, que comenzaron a concederse en marzo de 2023 (en el marco del acuerdo de movilidad firmado por Portugal), no están siendo renovadas por AIMA, según informa hoy el Diário de Notícias.
En respuesta, AIMA afirma que estas autorizaciones "siguen siendo aceptadas por todas las autoridades públicas portuguesas, a todos los efectos legales, hasta el 30 de junio de 2024", en el marco del decreto-ley que regula las "Medidas excepcionales y temporales relativas a la situación epidemiológica del nuevo Coronavirus - COVID 19", cuya primera versión data de marzo de 2020.
"Se admiten, en los mismos términos, hasta el 30 de junio de 2024, los documentos y visados relativos a la estancia en territorio nacional, cuya validez expire a partir de la fecha de entrada en vigor de este decreto-ley o en los 15 días inmediatamente anteriores", refiere la última actualización del título.
Según AIMA, "esta norma se aplica a todas las autorizaciones de residencia caducadas con posterioridad al 22 de febrero de 2020" y "las autorizaciones de residencia CPLP no se crearon hasta 2023, por lo que se aplica a todas las expedidas".
"Los usuarios con permisos de residencia caducados están siendo informados de la ampliación del plazo de validez por correo electrónico", ha señalado AIMA.
En declaraciones anteriores a Lusa, varios responsables del Gobierno habían prometido una solución para renovar estos visados, pero hasta ahora AIMA no ha respondido a las peticiones realizadas.