Con una longitud de 6,5 kilómetros y un recorrido circular, la ruta incluye 10 puntos de observación de flora, fauna, áreas de descanso y una zona de picnic en la sierra de Silves, una zona afectada por el gran incendio que se declaró en Monchique en

2018.

"El objetivo es llevar a la gente al interior para que puedan ver y disfrutar de la naturaleza, al tiempo que contribuye a la prevención de incendios forestales", dijo a Lusa el director regional del ICNF, Joaquim Castelão Rodrigues.

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El Trilho da

Parra

procede de un proyecto del ICNF, financiado por el Fondo de Medio Ambiente para "dar apoyo a una zona de gran riqueza medioambiental afectada por los incendios", en 2018 y 2023, señaló el

director.

En 2018, el fuego consumió alrededor del 60% de las 806 hectáreas del Bosque Nacional de la Herdade da Parra, destruyendo varias especies de árboles y animales autóctonos, entre ellos ciervos y perdices rojas.

Según

Joaquim Castelão Rodrigues, tras el incendio de 2018, el ICNF realizó tres aplicaciones "para restaurar el valor ambiental del bosque, a saber, la estabilización de emergencia, la reforestación y la intervención en la zona que no se vio afectada" por el fuego.

Para el director regional del ICNF en el Algarve, el sendero "pone de manifiesto la preocupación que existe con la preservación del bosque, sabiendo que el movimiento de personas es un factor de prevención y alerta ante situaciones de incendio".

El recorrido clasificado como "difícil" está abierto durante todo el año y es de acceso libre.