Los salarios de hasta 1.000 euros recibirán una desgravación mensual de unos 24 euros y las pensiones de hasta 992 euros tendrán una ganancia adicional de 30 euros, según las cuentas de ECO basadas en las nuevas tablas de retención publicadas en el Diário da República.

Los niveles de las tablas de retención y los tramos a deducir han subido para reflejar la nueva reducción del IRS aprobada en los Presupuestos Generales del Estado para 2025, que actualiza las horquillas de renta en un 4,6%, aumenta la existencia mínima (la cantidad hasta la que las retribuciones no tributan) hasta los 870 euros e incrementa la deducción específica (la cantidad que se deduce de las ganancias para determinar la base imponible) hasta los 4.462,15 euros.

Así, a partir de este mes, los trabajadores dependientes y los pensionistas que ganen 870 euros, referencia del nuevo salario mínimo nacional que aumentó 50 euros, seguirán estando exentos. Hasta diciembre del año pasado, sólo los ingresos de hasta 820 euros no requerían deducción fiscal.

Por ejemplo, un trabajador soltero sin hijos con un salario bruto mensual de 875 euros sólo deducirá 1,09 euros, lo que supone 25,74 euros menos en relación con los 25,74 euros que retenía a finales del año pasado.

En el caso de un salario bruto de 900 euros, la desgravación mensual será de 24,75 euros: la retención de 37,44 euros bajará a 12,69 euros. Las cuentas de ECO muestran también que a un salario de 992 euros se le deducirán 55,84 euros cuando, en diciembre, había que pagar al Estado 75,89 euros, lo que representa una diferencia de 20,05 euros.

Las pensiones de hasta 900 euros estarán exentas

En relación con las prestaciones por jubilación, ECO también ha realizado simulaciones para el caso de un jubilado soltero o de dos pensionistas casados sin personas a su cargo. Seguirán exentas las pensiones de hasta 900 euros brutos al mes. Una reforma de este valor tenía que pagar 17,79 euros al mes a laAgencia Tributaria(AT).

Las pensiones de 992 euros se deducirán ahora 30,84 euros, lo que supone 30,22 euros menos frente a los 61,06 euros que había que adelantar al Estado hasta finales del año pasado. Y un jubilado con una pensión de 1.000 euros sentirá un alivio en su bolsillo de 23,45 euros al mes.

Hay que tener en cuenta, sin embargo, que la retención a cuenta es un tipo de pago a cuenta, es decir, un anticipo al Estado. En la liquidación de 2026 se saldarán las cuentas. Los que retuvieron más pueden tener una devolución mayor y los que retuvieron menos pueden recibir menos o se les puede pedir que paguen impuestos.

"Retener menos es un reflejo de la actualización de los tramos del IR en un 4,6% aprobada en los Presupuestos Generales del Estado para 2025. Los tipos de retención son los mismos, lo que cambia son los tramos de renta, sujetos a un determinado impuesto, que aumentan, y los tramos a deducir para calcular el tipo impositivo", explica a ECO el especialista fiscal Luís Nascimento, de la consultora Ilya.

El especialista en Derecho Tributario también destaca que, con los Presupuestos Generales del Estado para 2025, "las retenciones para autónomos, los llamados recibos verdes, bajan del 25% al 23%".