Aunque Brasil sigue siendo un socio esencial, existe un potencial sin explotar para forjar lazos comerciales más fuertes con otras naciones sudamericanas, como Argentina, Paraguay, Uruguay y la región centroamericana en general. Eventos como el reciente Encuentro Empresarial Portugal-Argentina, celebrado en Lisboa, ponen de relieve la importancia de ampliar las oportunidades de comercio e inversión más allá de las asociaciones tradicionales. Al potenciar la colaboración económica con Sudamérica, Portugal puede diversificar sus relaciones comerciales internacionales y desempeñar un papel crucial como puente entre los mercados europeos y latinoamericanos.
El Encuentro Empresarial Portugal-Argentina sirvió de importante plataforma para explorar beneficios mutuos en sectores como el software, la tecnología, la sanidad, la industria y los servicios financieros. Estas áreas de colaboración demuestran cómo ambas regiones pueden aprovechar sus respectivas fortalezas para impulsar la innovación y el crecimiento económico. La economía digital y el avanzado ecosistema tecnológico de Portugal representan una oportunidad de primer orden para las empresas sudamericanas que buscan expandirse en el mercado europeo. Del mismo modo, las naciones sudamericanas ofrecen a Portugal acceso a mercados emergentes con una creciente demanda de soluciones tecnológicas e inversiones en infraestructuras.
Una de las principales ventajas de Portugal para estrechar lazos con Sudamérica es su posición estratégica dentro de la Unión Europea. Como puerta de entrada a la UE, Portugal constituye un punto de acceso para las empresas latinoamericanas que deseen ampliar sus operaciones en Europa. Su entorno favorable a las empresas, sus tipos competitivos del impuesto de sociedades y su mano de obra altamente cualificada lo convierten en un destino atractivo para la inversión internacional. Además, las conexiones lingüísticas y culturales de Portugal con América Latina, especialmente con Brasil, ofrecen una base para fortalecer las relaciones con las naciones hispanohablantes de la región.
El crecimiento económico de Sudamérica ofrece a Portugal la oportunidad de diversificar sus asociaciones comerciales y reducir su dependencia de los mercados europeos tradicionales. Países como Paraguay y Uruguay han experimentado un desarrollo económico constante, lo que ofrece potencial para aumentar el comercio y las inversiones bilaterales. Portugal puede beneficiarse de las exportaciones agrícolas, las industrias manufactureras y la creciente demanda de transformación digital de Sudamérica. A cambio, la experiencia de Portugal en energías renovables, tecnología financiera e infraestructuras inteligentes puede contribuir al desarrollo sostenible de estas naciones.
Para capitalizar estas oportunidades, Portugal debería organizar más cumbres empresariales y misiones comerciales similares al Encuentro Empresarial Portugal-Argentina. Reforzar la cooperación diplomática y económica a través de acuerdos como el Memorando de Entendimiento firmado entre Portugal y Argentina facilitará las asociaciones a largo plazo. Animar a las empresas portuguesas a explorar los mercados sudamericanos y, al mismo tiempo, atraer inversores latinoamericanos a Portugal creará una relación económica mutuamente beneficiosa.
A medida que cambia la dinámica económica mundial, Portugal tiene una oportunidad única de posicionarse como facilitador clave del comercio y la inversión entre Europa y Sudamérica. Ampliando su enfoque más allá de Brasil y fomentando la colaboración con las economías emergentes de la región, Portugal puede reforzar su huella económica global y crear nuevas oportunidades para las empresas a ambos lados del Atlántico.
Paulo Lopes is a multi-talent Portuguese citizen who made his Master of Economics in Switzerland and studied law at Lusófona in Lisbon - CEO of Casaiberia in Lisbon and Algarve.
