"No íbamos a cometer el error político de retirar las luces, perjudicando irremediablemente la oferta turística y transformando la Nochevieja en Madeira en una situación penosa, por no decir catastrófica, desde el punto de vista del atractivo", dijo.
El responsable insular, que hablaba durante una visita a una empresa de distribución de bebidas, en Funchal, reaccionó así a la decisión del Gobierno de la República de limitar la iluminación decorativa en Navidad durante el periodo comprendido entre las 18:00 y las 24:00 horas, según el plan de ahorro energético 2022-2023.
"La idea es digna y todos deberíamos adoptarla", dijo Miguel Albuquerque, subrayando, sin embargo, que el Gobierno de Madeira no la aplicará en la región.
"Las luces de Navidad son algo decisivo y fundamental para el fin de año en Madeira y para la oferta turística", dijo, destacando que "los efectos multiplicadores" de esta inversión del Gobierno Regional "son, de hecho, para hacer la Navidad en Madeira y, sobre todo, el Año Nuevo, una atracción turística."
Miguel Albuquerque también subrayó que se trata de una "excepción en nombre de la economía".