Cualquier persona que necesite alquilar una vivienda durante un periodo de tiempo determinado, por motivos profesionales, educativos, formativos o turísticos, puede recurrir a los denominados arrendamientos de corta duración (o temporales). Este tipo de arrendamiento no se destina a vivienda permanente, suele ser inferior a un año y está recogido en el Nuevo Régimen de Arrendamientos Urbanos. Se trata, por tanto, de un régimen alternativo al Alojamiento Local y al alquiler de vivienda de larga duración, y que cada vez despierta más interés entre los propietarios.
Los datos más recientes de idealista revelan que había 3.599 viviendas en alquiler en este formato a finales de 2024, la cifra más alta registrada en la serie disponible que se remonta a 2017. Y el stock de alquiler temporal es un 50% superior al observado a finales del año anterior, lo que se explica por la inestabilidad legislativa que se ha dejado sentir en los Alojamientos Locales en el último año, así como por la búsqueda de una alternativa dirigida a optimizar la rentabilidad económica de la vivienda.
¿Dónde hay más alquileres de corta duración?
Casi todas las capitales de distrito (o comunidades autónomas) cuentan con al menos una vivienda en régimen de alquiler temporal -Portalegre y Vila Real son excepciones-. Sin embargo, existe una clara concentración de este tipo de alojamiento en grandes núcleos urbanos como Lisboa y Oporto, con 994 y 399 viviendas en alquiler de este tipo, respectivamente.
Además de los municipios de la capital y Oporto -donde la oferta aumentó en torno al 60% en el último año-, sólo otras seis grandes ciudades se contabilizaban con 30 o más casas en alquiler a corto plazo a finales de 2024: Viana do Castelo, Braga, Setúbal, Faro, Funchal y Coimbra. En todas ellas, hubo aumentos de la oferta en el último año.
Entre estas ocho ciudades con muestras representativas, la demanda de viviendas de alquiler a corto plazo es más expresiva en Faro, seguida de Coimbra, Setúbal, Funchal y Lisboa, con cerca de 20 contactos por anuncio. Por debajo de este nivel se sitúan Braga, Viana do Castelo y Oporto. También hay menos presión sobre la demanda de viviendas de alquiler temporal en comparación con el año anterior.
Es en Lisboa donde los alquileres de corta duración son más caros (24,6 euros/m2), seguida de Oporto (19,5 euros/m2) y Funchal (16,8 euros/m2). Y Coimbra es la ciudad con los alquileres más asequibles de las ocho analizadas con muestras representativas, con un coste medio de 12,6 euros/m2.