Estos cambios incluyen una reducción de los tipos aplicables a los seis primeros tramos impositivos, la actualización de la deducción específica (que llevaba varios años "congelada" en 4.104 euros) y del mínimo existencial.
Las nuevas tablas incluyen dos modelos de tipos impositivos: uno, con tipos más bajos, que se aplicará en los meses de septiembre y octubre, y otro en el resto de meses del año, con el primero se pretende compensar a los trabajadores y pensionistas por haber retenido demasiado entre enero y agosto.
Esta compensación puede dar lugar a que muchos trabajadores y pensionistas no retengan ningún impuesto en origen este mes (y el siguiente) o que se les retenga una cantidad significativamente inferior a la que están acostumbrados.
A partir de noviembre, también habrá alguna diferencia respecto a las cantidades retenidas en los ocho primeros meses de este año, pero será menos significativa que este mes y el siguiente.
Aunque las entidades que tramitan las nóminas han tenido casi un mes para adaptar sus sistemas a las nuevas tablas, puede darse el caso de que esta adaptación no se haya realizado a tiempo para el pago de las nóminas de septiembre, teniendo que hacer ajustes en los meses siguientes.
En declaraciones a Lusa, el secretario general de laFederación de Sindicatos de la Administración Pública(Fesap), José Abraão, dijo no tener conocimiento de que haya sectores de la función pública que no estén aplicando este mes los nuevos tipos de retención, pero advirtió de que el aumento de la renta disponible que puedan experimentar los trabajadores este mes y el próximo no se mantendrá.
"A partir de noviembre, la diferencia de ingresos [respecto a lo percibido entre enero y agosto] es pequeña y, por lo tanto, la gente debe estar preparada para ello y también para que, el año que viene, tenga una devolución menor o incluso impuestos que pagar", destacó el dirigente sindical.
Cabe señalar que, en el caso de los pensionistas, el ajuste del IRS sólo se realizará a partir de octubre, independientemente de si la pensión se paga a través de la Seguridad Social o del Fondo General de Pensiones (CGA).