"Como ejemplo de lo que ocurre en el sector agrícola, donde hay una asignación por área, sugerimos que se considere la utilización de la misma lógica para el consumo urbano, con la implementación de una asignación por habitante - como ocurre en Egipto, por ejemplo", dice la entidad en una carta enviada al grupo de trabajo.

Macário Correia, presidente de la Asociación Sotavento Algarvio Regantes y uno de los miembros fundadores de la federación, creada en agosto del año pasado, consideró, en declaraciones a Lusa, que se trata de "una cuestión de justicia".

"No tiene sentido que las restricciones sean para unos y no para otros, y no tiene sentido que haya asignaciones para la agricultura y no para otros sectores", explica.

Mientras que en la agricultura hay asignaciones por cultivo y por unidad de superficie, referenciadas en los títulos de aprovechamiento de recursos hídricos subterráneos o en los títulos de aguas superficiales, "en el consumo urbano no hay ninguna restricción de este tipo", añade el director.

"Es algo que se hace necesario porque hay un consumo urbano desordenado, que no cuida la eficiencia y el ahorro", destacó Macário Correia, añadiendo que algunos ayuntamientos del Algarve, "el verano pasado, desperdiciaron agua", concretamente con el riego de "aceras, asfalto y rotondas".

La asignación se definiría "en función" de la población y de la capacidad hotelera existente en cada municipio, explicó el ex alcalde de Faro y Tavira.

"Un ayuntamiento tiene tantos habitantes y tantas plazas hoteleras. Debería haber una asignación definida en función de esta necesidad de consumo. Basta mirar el consumo medio de aquellos [municipios] que tienen una gestión más eficiente y ponerlos sobre la mesa", explicó.

En la carta enviada al grupo de trabajo "Agua que une", Fedagri recuerda que la Organización Mundial de la Salud "sostiene que 110 litros/día son suficientes para satisfacer las necesidades básicas de consumo e higiene de una persona".

En Portugal, "diversas fuentes de información apuntan a un valor medio de 190 litros/día por persona", y, en el Algarve, según la APA, "el consumo de los turistas es superior a 300 litros/día", reza el documento.

La federación sostiene que la agricultura algarvía "se ha ido adaptando" a la situación de sequía meteorológica que vive el Algarve desde 2012 y que ha realizado inversiones "que se tradujeron en una reducción del 50% del consumo de agua" respecto a los valores de 2002.

Multas

Entre las otras reivindicaciones presentadas al grupo de trabajo, Fedagri señala "la existencia de multas para los municipios que continúen presentando pérdidas de agua por encima de lo razonable", indicando que, según datos de la APA de finales de 2023, las pérdidas de agua en las redes municipales "representaban 30 hm3 [hectómetros cúbicos] de agua cada año".

El aumento de la capacidad de almacenamiento de agua, una gestión más correcta de los acuíferos del Algarve, el aumento del volumen de aguas residuales tratadas y el refuerzo de la concienciación de la población y de la desalinizadora son los otros puntos abordados por la Federación de Agricultores del Algarve.

La iniciativa "Agua que une", que deberá presentarse en enero, pretende definir la estrategia del país para la gestión, almacenamiento y distribución eficaces del agua.