¿Alguna vez se ha preguntado cómo se cuelgan boca abajo cuando se posan sin que la sangre se les suba a la cabeza? Gracias a unos tendones especiales que bloquean los dedos de los pies y las garras, pueden agarrarse con fuerza sin necesidad de esforzarse, y las válvulas de las venas y arterias evitan que la sangre corra a toda prisa. Los murciélagos son auténticos voladores con alas que se asemejan a una mano humana modificada: imagina la piel entre los dedos más grande, más fina y estirada. Esta membrana cutánea flexible y sus numerosas articulaciones móviles los convierten en ágiles voladores.
Ecolocalización
Justo antes de la puesta de sol, los murciélagos salen a cazar mosquitos, jejenes y jejenes. Para localizar a sus presas, utilizan la ecolocalización, que produce ondas sonoras a frecuencias muy superiores a la audición humana. Estas ondas rebotan en los objetos y vuelven a los oídos de los murciélagos, que están afinados para reconocer sus propios sonidos.
Credits: AP;Murciélagos en Portugal
Nunca he visto un murciélago aquí, pero sé que los hay a miles y que son muy felices tanto en entornos urbanos como en el campo. Se sabe que hay unas 25 especies en Portugal, y existen medidas legales para mantenerlas protegidas, incluidas acciones para hacer cumplir la ley, ya que todas las especies de murciélagos están protegidas por la legislación portuguesa desde 1967.Diversas convenciones internacionales sobre fauna silvestre intentan garantizar que el comercio internacional de especímenes de animales y plantas silvestres no amenace la supervivencia de las especies
. Además, las poblaciones de murciélagos en las ciudades son cada vez más comunes: se les encuentra posados bajo puentes, en edificios vacíos y en los árboles de los parques. En ciudades como Lisboa, hay miles de murciélagos de varias especies, y al anochecer, en el Castelo de S. Jorge, varias especies de murciélagos sobrevuelan las murallas, las torres, la barbacana y el foso
.Al parecer, el murciélago más común aquí en Portugal es el murciélago pardo pequeño u orejudo de ratón (Myotis), seguido del pipistrelle común. Afortunadamente no se encuentra aquí, pero el zorro volador de corona dorada, con una envergadura de hasta 1,8 m, que se encuentra en Filipinas, es la especie de murciélago más grande del mundo, con individuos que pesan hasta 1,40 k. En comparación, un pipistrelle pesa unos escasos 5 gramos.
Principales amenazas en Portugal
Una de las amenazas para los murciélagos son las molestias que les causan las personas que practican actividades al aire libre y los pastores que bloquean la entrada de cuevas verticales para evitar que sus animales caigan en ellas. De acuerdo con la legislación portuguesa, las entradas de las galerías de las minas inactivas suelen cerrarse con muros, pero algunas siguen teniendo entradas abiertas, y se están haciendo esfuerzos para evitar el bloqueo de las entradas de las galerías utilizadas por los murciélagos por parte de las autoridades mineras.
Pérdida de alimento
El paisaje de Portugal está cambiando, y las prácticas tradicionales de uso de la tierra eran en general mejores para los murciélagos. El cambio climático, la pérdida de hábitat, la disminución de las poblaciones de insectos y las colisiones con turbinas eólicas están provocando la pérdida de su fuente de alimento. Al ser capaces de comer su propio peso corporal en insectos cada noche, pueden ayudar a silvicultores y agricultores a proteger sus cultivos.
Mitos
Llamarlas "ratas voladoras" no es más que un mito, ya que ni siquiera están emparentadas. Otro mito que infundía miedo a las jovencitas era que, si salías sola, los murciélagos volaban hacia tu pelo; en realidad, lo más probable es que tuvieran su ecolocalizador enfocado hacia un jugoso mosquito que se dirigía a tu cuello.
Marilyn writes regularly for The Portugal News, and has lived in the Algarve for some years. A dog-lover, she has lived in Ireland, UK, Bermuda and the Isle of Man.