Es casi cinco veces más de lo que se pedía a finales de 2021, cuando fue adquirida por un empresario.

Fue en 2009 cuando la antigua prisión de Funchal, situada en la zona de Viveiros, fue desactivada por decisión del Consejo de Ministros. En aquel momento, los presos fueron transferidos a la Prisión de Funchal, en Cancela, según Jornal da Madeira.

Más tarde, a finales de 2021, el edificio se puso a la venta por 520 mil euros. Y acabó siendo comprado por el empresario Paulo Fernandes, de la empresa Conta Mais Certa, que pretendía transformar el espacio en una institución de enseñanza superior. Pero el proyecto no avanzó.

Ahora, el mismo empresario ha vuelto a poner a la venta esta antigua cárcel de Madeira por casi cinco veces más: 2,8 millones de euros. El edificio tiene 1.908 metros cuadrados (m2) de superficie bruta y 1.459 m2 de terreno y está situado en la Rua Arcebispo D. Aires, en la región de Viveiros.

El edificio está siendo promocionado por agencias inmobiliarias locales debido a su "enorme potencial" para convertirse en un desarrollo turístico en Funchal, aunque también podría construirse allí un edificio residencial, afirma el mismo periódico.