"La operación se completó con éxito. Ya no hay barcos en la Praia Grande de Ferragudo, que constituían un peligro para la seguridad y limitaban las actividades de baño", declaró a Lusa Luís Encarnação, alcalde de Lagoa.

El armador fue el responsable de la operación, que se llevó a cabo con la ayuda de un remolcador procedente del puerto de Sines.

Miembros del comando local de la Policía Marítima de Portimão supervisaron los trabajos de retirada de esta última embarcación, según un comunicado de la Autoridad Marítima Nacional(AMN).

El pasado martes, la Cámara de Lagoa ya retiró con éxito tres de las cuatro embarcaciones varadas e inmovilizadas en la playa en los últimos meses debido al mal tiempo.

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