El clima más cálido es siempre bienvenido, ya que muchos de nosotros salimos a los parques y las playas para obtener nuestra dosis de vitamina D, pero también podría causar estragos en nuestro sueño.
¿Preocupado por conseguir una buena noche de sueño? Estos son los errores del sueño que debes evitar...
1. La habitación está demasiado caliente
"Una temperatura más fresca es óptima para dormir", aconseja la doctora Rebecca Robbins, científica y experta en sueño de Savoir Beds, que afirma que lo mejor son unos 18 o 19 grados.
Explica: "La capacidad de tu cuerpo para regular la temperatura es una parte importante de cómo regula el sueño. Durante el sueño con movimientos oculares rápidos, las células reguladoras de la temperatura del cerebro se desconectan y la temperatura depende del entorno. Si el dormitorio es demasiado cálido y está tapado, o si la superficie de descanso no puede respirar y dispersar la humedad, es posible que empiece a sudar y a calentarse en exceso", sugiere la experta, que sugiere que el sueño puede verse perturbado si la temperatura supera los 23,8C.
Sin embargo, algunas personas pueden tener problemas con el polen si tienen las ventanas del dormitorio abiertas por la noche.
Max Wiseberg, experto en alérgenos transportados por el aire y creador de HayMax, afirma: "Coloca mosquiteras con filtro de polen sobre las ventanas y luego puedes abrirlas. Si tienes aire acondicionado, siempre que tengan buenos filtros, eso ayudaría" También recomienda usar un bálsamo de barrera contra los alérgenos alrededor de la nariz y los ojos.
2. Te acuestas demasiado tarde
Con las noches más claras y el clima más cálido, es posible que pases más tiempo en el jardín o que cenes un poco más tarde.
Pero Robbins nos aconseja que nos comprometamos con una rutina a la hora de acostarnos y la cumplamos: "Dormirse a la misma hora y levantarse a la misma hora lo es todo. Permite que el cuerpo trabaje con su ritmo circadiano natural -en lugar de luchar contra él-, el reloj interno de nuestro cuerpo que controla los tiempos de cada sistema de órganos y procesos corporales. Si nos atenemos a un horario, nuestro cuerpo aprende cuándo debe esperar el sueño y la vigilia."
3. Te quedas despierto durante horas por la noche
Estar tumbado en la cama sintiéndose acalorado y molesto a las 3 de la madrugada es una de las mayores frustraciones de la vida. Sin embargo, esperar volver a dormir puede ser contraproducente.
"Es algo que a muchos nos han dicho que hagamos: quedarnos en la cama si nos despertamos. Pero en realidad es una de las peores cosas que podemos hacer si nos cuesta dormir", dice Robbins.
En su lugar, aconseja levantarse después de 15 minutos, mantener las luces bajas y hacer algo de yoga suave, leer o algunas tareas no estimulantes -como doblar la ropa- antes de volver a la cama.
4. La ropa de cama no está a la altura
El colchón y la ropa de cama también desempeñan un papel fundamental a la hora de garantizar el sueño.
"Las neuronas relacionadas con el sueño son muy sensibles a la temperatura, por lo que un colchón sin apoyo o que retenga el calor limitará la calidad del sueño", dice Robbins, "una superficie de descanso transpirable hecha de materiales naturales puede ayudar a evitar el sobrecalentamiento. Las fibras naturales son excelentes para absorber la humedad, pero también son transpirables y permiten la circulación del aire, manteniéndote fresco durante las noches más cálidas".
El experto en sueño Patrick Ross, de Nectar Sleep, sugiere que te replantees tu edredón: "Lo último que quieres es dar vueltas dentro de un edredón de alto gramaje. En su lugar, asegúrate de elegir ropa de cama de lino o algodón, que es mucho más transpirable y absorbente, para ayudar a mantener a raya los sudores nocturnos".
"O bien, despídete del edredón por completo y toma la lección de nuestros amigos europeos haciéndote con una sábana ligera que te mantenga cubierto -pero fresco- por la noche".
5. Estás deshidratado
Ross dice: "La deshidratación puede afectar negativamente a lo bien que se duerme por la noche, así que es fundamental mantenerse bien hidratado. No bebas litros de agua directamente antes de acostarte, sino que sigue bebiendo vasos de agua fresca a lo largo del día.
"La cafeína y el alcohol también deshidratan el cuerpo y tienen un efecto diurético, así que si quieres dormir bien con el calor, ambos deben evitarse. Si te despiertas sediento en mitad de la noche, evita el impulso de beber un vaso tras otro. En su lugar, toma largos sorbos de agua fría hasta que te sientas satisfecho".