Puede que este año te propongas perder peso, ponerte en forma, dejar de fumar o lo que sea, pero con demasiada frecuencia esas buenas intenciones se desmoronan en muy poco tiempo.

Lo que hay que hacer, dice la Dra. Gemma Newman, es seguir estos sencillos pasos para recuperarse y mantenerse bien.

1. Gratitud

Newman explica que el sistema límbico del cerebro es responsable de las emociones, y que esa parte concreta del cerebro también incluye el hipotálamo, que regula funciones corporales como el hambre, el sueño, el metabolismo y el crecimiento.

"Los estudios han demostrado que la gratitud activa todo el sistema límbico y, en particular, el hipotálamo, lo que hace que los sistemas funcionen de forma más eficiente", dice, señalando que numerosos estudios han relacionado la gratitud con un mejor sueño, y debido a que la gratitud inunda el cerebro con hormonas del bienestar, se ha relacionado con la disminución del dolor, la reducción de la presión arterial y la reducción del estrés.

Entre los hábitos sencillos que pueden fomentar la gratitud figuran acostarse a la misma hora y salir a la naturaleza, y sugiere pensar en tres cosas por las que se está agradecido al levantarse y al acostarse, y llevar un diario de gratitud en el que se anoten todas las cosas por las que se está agradecido.


2. Amor

"Sitúo la gratitud y el amor, dos estados emocionales, como los primeros pasos hacia un cuerpo y una mente sanos. Son fundamentales para nuestro bienestar", subraya Newman, que en su libro habla de tres tipos de amor: a uno mismo, a los demás y a la comunidad.

Sugiere a la gente que utilice afirmaciones positivas, identifique modelos de conducta o mentores, aprenda a aceptar cumplidos y se esfuerce por mantener relaciones positivas, ya que los estudios demuestran que la soledad y el aislamiento son factores de riesgo de muerte prematura.

Aprender a perdonar también forma parte del amor, señala: "Los datos demuestran que el entrenamiento activo en el perdón puede realmente reducir la percepción del dolor en personas que padecen enfermedades crónicas".

3. Fuera de

Las pruebas que demuestran el poder restaurador del mundo natural son "abundantes y emocionantes", afirma Newman.

Se ha demostrado que la exposición al sol -no en exceso, por el riesgo de cáncer de piel- reduce la presión arterial y la mortalidad cardiovascular, y esto puede estar relacionado con la liberación de óxido nítrico, que tiene un efecto positivo sobre la presión arterial, cuando el sol toca la piel. La vitamina D también se produce al contacto con la piel, y es vital para el crecimiento óseo y muchas otras cosas. Un estudio también descubrió que la vitamina D puede ayudar a mejorar la función cerebral, afirma Newman.

Y luego están los beneficios para la salud mental de salir al aire libre. "Conectar con la naturaleza puede tener un profundo efecto en nuestra salud mental", subraya Newman, que señala que en un estudio se pidió a dos grupos que caminaran 90 minutos al día, uno en una zona natural y otro en un entorno urbano muy transitado. Pruebas posteriores demostraron que los que caminaban en la naturaleza mostraban una menor actividad en una región del cerebro asociada a la rumiación, un factor clave en la depresión.

4. Veg

Newman ya ha escrito The Plant Power Doctor, un libro sobre el poder de la nutrición vegetal para la salud, y señala: "En todo el mundo, se dice que las dietas poco saludables contribuyen a más muertes y discapacidades que el tabaco, el alcohol y el consumo de drogas juntos. El análisis más exhaustivo de los factores de riesgo ha determinado que una de cada cinco muertes se debe a una dieta poco saludable."

Según la experta, las dietas pobres en cereales integrales, fruta, frutos secos, semillas y verduras, y ricas en sal y grasas saturadas (procedentes sobre todo del consumo de carne y alimentos ultraprocesados), son las menos saludables, y añade: "Las elecciones saludables y la nutrición son claves para una mente y un cuerpo sanos, así como la autocompasión y la conciencia de cómo nos hacen sentir nuestras elecciones alimentarias".

5. Haz ejercicio

Además de ser extremadamente bueno para nosotros físicamente, el ejercicio también es estupendo para la mente: Newman afirma que grandes estudios demuestran que está estrechamente relacionado con la felicidad y que es útil para tratar la depresión. "El movimiento es necesario para un cuerpo y una mente prósperos", afirma, y señala que se puede reducir el riesgo de muerte prematura en un 20-30% caminando entre 20 y 30 minutos al día, en comparación con las personas que no hacen nada de ejercicio.

Y si se va a vivir mucho tiempo, tener un aspecto más joven es una ventaja añadida: según las investigaciones, el ejercicio ayuda a ralentizar el envejecimiento celular.

6. Duerme

"Dormir es vital", dice Newman. "Igual que el ejercicio y una buena dieta nos ayudan a mantenernos bien, el sueño también puede ayudarnos a mantener nuestro peso y alejarnos de problemas graves como infartos, obesidad, cáncer y Alzheimer".

Aunque el sueño puede mejorar el estado de ánimo, contribuir a un corazón más sano, facilitar el mantenimiento del peso, fortalecer el sistema inmunitario, eliminar el dolor, reducir el riesgo de Alzheimer y mejorar la concentración y la atención, una de cada tres personas tiene dificultades para conciliar el sueño, afirma Newman.

Crear una rutina de sueño saludable, hacer siestas sensatas, comer más temprano, hacer ejercicio, relajarse activamente y meditar pueden ayudar, afirma.

Get Well Stay Well, de la Dra. Gemma Newman, ha sido publicado por Ebury.