Este programa pretende reducir las 330.000 toneladas de alimentos comestibles procedentes de granjas que cada año no llegan al mercado mediante la financiación de organizaciones benéficas, que a menudo carecen de recursos para recoger estos productos a gran escala. Según el plan del Gobierno, las organizaciones de distribución de alimentos podrán solicitar subvenciones a partir de 20.000 libras, que podrán destinarse a la compra de equipos, transporte y formación del personal.


El fondo se propuso por primera vez en 2018 y finalmente ha sido aceptado después de que una carta abierta al Gobierno por parte de un grupo de cientos de organizaciones benéficas pidiera su reactivación.