"En 2025, se prevé que el precio del pan siga subiendo. Este aumento está impulsado por varios factores, entre ellos el aumento de los costes de producción, como las materias primas, y el aumento del salario mínimo a 870 euros a principios de 2025", dijo la presidenta de la junta directiva de ACIP, Deborah Barbosa.

A esto se añaden los costes energéticos y de transporte, con un impacto directo en los precios finales de los productos.

Sin embargo, la ACIP defendió que Portugal es uno de los países con el precio por kilo de pan más bajo de la Unión Europea y con la mejor relación calidad/precio.

Este año, las ventas de panadería y confitería registraron un ligero aumento, pero en términos de cantidad, hubo una reducción.

A la cabeza de las ventas siguen estando "los clásicos", como el pan tradicional y los pastéis de nata, pero también hay una demanda creciente de productos clasificados como innovadores y saludables, a saber, panes integrales y dulces a base de plantas.

Deborah Barbosa afirma que los portugueses han ido ajustando sus compras, optando por cantidades más pequeñas y productos más baratos debido a la pérdida de poder adquisitivo. "Sin embargo, la calidad sigue siendo un factor importante", y muchos consumidores prefieren los productos artesanales.

Para estas Navidades, ACIP espera que las ventas se mantengan al mismo nivel que en 2023 o aumenten ligeramente.